Aprender a meditar es un requisito existencial básico, para aprender a vivir. Sin embargo, precisamos olvidar lo aprendido de oriente, para explorar, otros senderos de meditación más nuestros.
Meditar es convertirnos en lo que hacemos, es abolir el tiempo y la distancia, la dualidad que separa al observador de lo observado, es volverse uno con lo que contemplamos, es dejarse llevar por el transparente río del silencio y brillar la oscuridad saboreando la unicidad. Todo es uno y todo está vivo, el cielo también somos nosotros y el Universos que contemplamos, eso que era intuición y presentimiento, ahora es realidad en el contexto meditativo.
Meditar es desatar la razón y dar la palabra al silencio, es desembocar en la contemplación y fusionarse con lo que hacemos, es ahogar la oscuridad de la ignorancia y comprender sin razonar, meditar es incendiar la maleza de la información, para transmutarla en conocimiento y este , alquimizarlo en sabiduría, vibración que se integra a nuestro campo energético.
Meditar es sintonizar el silencio, descender atentamente y sin contenido mental a nuestro espacio interior, como viajeros multidimensionales, explorando el universo y sus orígenes, escritos en nuestro microcosmos.
La meditación Tawa, como nosotros la aprendimos de los abuelos, es el abecedario del silencio elocuente, que nos transporta a la biblioteca invisible, donde se guarda la memoria de todos los tiempos; es dar la palabra al alma y escribir en el cielo que estamos vivos, es desnudarse de prejuicios y miedos, abolir la fragmentación y quedar hechizados por la plenitud, esa condición que habla del canto sin palabras, que pule la piedra hasta convertirla en preciosa.
Meditar es sacarle brillo a cada instante, es derramar silencio en cada huella, es tejer acciones sin intensiones, solo convertidos en lo que hacemos, es pintar transparencias con nuestra mirada.
Quienes meditan, se preparan para acceder al idioma de las piedras y su memoria pétrea. Ellas están cumpliendo una misión: recordarnos la nuestra, mientras almacenan conocimientos de otras épocas, aquellos urgentes de recordar. Se habilitan también para comprender el idioma de los árboles, hermanos mayores que hace siglos reciben mensajes del universo para traducir a los humanos, ellos son la memoria viva que espera nuestra vibrantes vibraciones luminosas, para contarnos secretos de otros tiempos, que dinamicen nuestro crecimiento.
Quienes meditan, sincronizan sus cuerpos y afinan su vibración, purifican sus días y pintan de colores su esperanza. Al tener su vida conectada al silencio meditativo, desvanecen temores y se purgan de confusión. Meditar, es constatar que todo está conectado, que el silencio es el idioma universal, que podemos enlazar nuestra vida con la profundidad y buscar en la poesía, la estrella fugaz ,que se cayó de nuestra noche.
Se puede meditar de múltiples maneras, puedes encontrar la tuya, inventar tu modalidad meditativa, mas allá de posturas exóticas y mantras importados, lo importante es trascender la técnica y sintonizar el silencio, escalar hasta lo alto de la unicidad, donde ningún pensamiento, ningún recuerdo sobrevive y fusionarse a la forma elegida para viajar.
Puedes meditar contemplando el océano o la montaña, que tu corazón contemple, mientras el observador se fusiona con lo que observa; un instante de meditación, vale más que horas de simulacros exóticos, camuflaje de caravanas de pensamientos de quienes, no atravesaron la técnica meditativa que desconoce la meditación profunda.
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6 comments. Leave new
Excelente..
Gracias gracias por transcribir y haber podido tener el.privilegio de entender de que se trata meditar muchicimas gracias ☮
Gracias Chamalú!!! por compartir sus conocimientos que nos ayudan a entender y a vivir mejor.
Deseo el curso, pero ya no encuentro los links para hacer el pago o el deposito. Me los pueden mandar por favor, gracias. Saludos
Leer tus palabras es como transportarme a mi lugar mágico y transcribir textualmente lo que siento. Muchas gracias, mil bendiciones.
CHAMALU siempre ilumina mis maravillosos diás sobre este planeta con sus consejos. Infinitas gracias